En un descubrimiento reciente, la misteriosa “cara de Harakbut” ha sido encontrada una vez más en lo profundo de la vibrante selva amazónica. Este notable sitio ahora es reconocido como un componente vital del rico patrimonio cultural del Perú.
La imagen mostrada arriba se conoce comúnmente como ‘Rostro Harakbut’ o ‘Harakbut Face’ entre los indígenas Harakbut. Este fascinante lugar está ubicado dentro de la remota reserva Harakbut, situada en el desierto del sureste de Perú. Aunque fue desenterrado por primera vez en 2014, el sitio permanece en gran medida inexplorado, lo que genera una intriga generalizada sobre sus orígenes y propósito. Persisten muchas preguntas, la principal es si esta extraordinaria formación es un suceso natural o un intrincado monumento creado por manos humanas.
Según el pueblo Harakbut, el ‘Rostro’ ha sido una parte integral de su tradición oral durante incontables generaciones. Se cree que ha existido desde tiempos inmemoriales, ya que sus mayores han transmitido historias sobre él a través de los siglos. La comunidad Harakbut venera al ‘Rostro’ como algo parecido a una deidad. Además, afirman que hay dos ‘Rostros’ más, pero su ubicación exacta sigue siendo un misterio. Sin embargo, han logrado localizar a uno de los tres.
En octubre del año anterior, un grupo de hombres de Pipe Harakbut se embarcaron en una expedición al ‘Rostro’, acompañados por el cineasta británico Paul Redman. El documental resultante, titulado ‘La Reunión’, se proyectó en Lima en noviembre pasado y muestra las experiencias de dos líderes Harakbut, Luis Tayori y Jaime Korisepa.
En el vídeo a continuación, Tayori y Korisepa comparten sus encuentros con los ‘Rostro’, conocimiento que les transmitieron los ancianos del clan Harakbut con quienes colaboraron hace cuatro años. Para Tayori, el ‘Rostro’ tiene un significado profundo y, al finalmente encontrarlo, cree que representa una reunión con sus antepasados y tiene el potencial de fortalecer su comunidad. Del mismo modo, Korisepa explica que el ‘Rostro’ siempre ha existido, pero hasta ahora no sabían cómo acceder a él. Ser testigo del ‘Rostro’ fue una experiencia cargada de emociones para ambos.
En el remoto valle del río no hay otras rocas con una forma similar a ésta. Se alza elegantemente, con vistas a un valle con una cascada y una cuenca debajo, parecido a un anfiteatro. Las marcas que lo recubren sugieren que fue tallado con herramientas simples. Curiosamente, en realidad hay dos ‘Rostros’: una formación rocosa más pequeña dentro de la más grande. Las rocas a lo largo del río canalizan el flujo de agua para evitar que golpee directamente la cara de ‘Rostro’, de una manera que haría imposible que la cara haya sido causada por el impacto incluso de las tormentas más fuertes. El pueblo Harakbut no tiene una historia escrita, pero el ‘Rostro’ ha sido parte de su tradición oral durante generaciones.
Como se mencionó anteriormente, según información de los mayores, existen dos ‘Rostros’ más. Esta información ha sido corroborada por Manuel Roque Prada, quien afirma haber tomado una fotografía en 2009 mientras trabajaba para South American Exploration, empresa contratada por Hunt Oil para realizar estudios sísmicos.
Recientemente, el Ministerio de Cultura del Perú ha designado oficialmente un lugar específico como “Patrimonio Cultural de la Nación”, lo que significa su protección contra daños. Sin embargo, esta declaración también abre la puerta a más personas interesadas en explorar el tesoro cultural ubicado dentro del área natural protegida de Madre de Dios. Sigue siendo incierto si esto conducirá a resultados positivos para este sitio sagrado, pero sólo podemos esperar lo mejor.